El proceso de diseño de un producto consiste en imaginar, conceptualizar, probar, repetir y perfeccionar un producto de forma que esté listo para su usario final.
Estos procesos incluyen:
- Crear una imagen de cómo debería verse el producto
- Planear borradores
- Probar el producto
- Repetir varias veces para corregirlo eficientemente
- Perfeccionar hasta que se cree un producto final
Los diseñadores pasan una parte significativa de su tiempo en cada uno de estos pasos, lo que significa que el diseño de productos es una mezcla entre investigación, estrategia, conocimiento de la industria y capacidad creativa.